Signos y síntomas de la hepatitis C
La hepatitis C es una infección del hígado causada por el virus de la hepatitis C (VHC). La infección puede ser aguda (a corto plazo) o crónica (a largo plazo).
En la fase aguda, que puede durar hasta 6 meses después de la infección, muchos no experimentan síntomas. Sin embargo, algunos pueden presentar:
- Fiebre
- Fatiga
- Pérdida del apetito
- Náuseas y vómitos
- Dolor abdominal
- Orina oscura
- Heces claras
- Dolor en las articulaciones
- Coloración amarillenta de la piel y los ojos (ictericia)
En la fase crónica, la mayoría no presenta síntomas hasta que la enfermedad ha avanzado y dañado el hígado. Los signos pueden incluir:
- Fatiga persistente
- Debilidad
- Picazón en la piel
- Hinchazón en las piernas y los tobillos
- Acumulación de líquido en el abdomen
- Confusión mental
- Sangrado
- Ictericia
Es importante destacar que no todos experimentan los mismos síntomas. La gravedad y la presentación dependen de varios factores, como la edad, el estado de salud general y la cepa del virus.
Si cree que puede estar en riesgo de tener hepatitis C, es fundamental que consulte a un médico para realizar una prueba de detección. El diagnóstico temprano y el tratamiento oportuno pueden prevenir o retrasar el daño hepático grave.
Las formas de transmisión del VHC incluyen:
- Contacto con sangre infectada: Compartir agujas o jeringas, transfusiones de sangre sin analizar, piercings o tatuajes con equipo sin esterilizar.
- Relaciones sexuales sin protección: El VHC puede transmitirse a través del contacto sexual, especialmente con parejas que tienen múltiples parejas sexuales o antecedentes de VHC.
- De madre a hijo: El VHC puede transmitirse de una madre infectada a su hijo durante el parto.
Existen medidas para prevenir la infección por VHC:
- No compartir agujas o jeringas.
- Utilizar prácticas sexuales seguras, como el uso de condones.
- Vacunarse contra la hepatitis B.
- Realizarse la prueba de detección del VHC si se encuentra en riesgo.
El tratamiento para la hepatitis C ha avanzado significativamente en los últimos años. Los nuevos medicamentos antivirales son altamente efectivos para eliminar el virus del cuerpo en la mayoría de las personas.
Si tiene hepatitis C, es importante que consulte a un médico especialista para recibir el tratamiento adecuado.